Este viernes marca una semana desde que nueve excadetes de Cobreloa fueron privados de su libertad luego de ser formalizados por el Ministerio Público por el delito de violación en grupo. La acusación se basa en la denuncia de una joven que reportó haber sido víctima de una agresión sexual durante una fiesta en septiembre del año 2021. La causa estuvo archivada durante varios meses después de que la víctima inicialmente retirara la acusación, pero posteriormente se reactivó. Actualmente, la carpeta investigativa contiene una serie de peritajes, informes y declaraciones, tanto de la víctima como de testigos e imputados. Entre los documentos revelados por La Tercera se encuentra la declaración de Lucas Román Avilés, quien según el Ministerio Público prestó cobertura para que el delito se llevara a cabo. Aunque Román Avilés afirma no haber participado directamente en la agresión, admitió haber grabado y presenciado la escena. De acuerdo con su versión de los hechos, ese día Román Avilés llegó más tarde a la vivienda donde se celebraba la fiesta, la cual pertenecía a los ex cadetes y donde él residía. Al entrar en su habitación, se encontró con la joven identificada como inicial V manteniendo relaciones sexuales con Luciano Parra Villanueva y Jhan Góngora Ordóñez, según él, de manera consensuada. “Me quedo ahí y me dicen que grabe, lo hice, y alcancé a grabar tres segundos, pero después lo borro y me voy (...) Le pregunté a ella si estaba de acuerdo con lo que estaba pasando, y me dijo que sí” , detalló el excadete. Aunque la mayoría de los imputados han afirmado que la mujer aprobaba lo que ocurría, las declaraciones de Román Avilés han tendido a normalizar los hechos que desencadenaron la denuncia. Estaba acostumbrado a vivir situaciones de no privacidad, de sexualidad masiva. Muchas veces mis compañeros me decían que llegara más tarde, porque querían estar con una niña . Estaba acostumbrado, por eso esto no era chocante ya para mí, sostuvo. Además, el involucrado detallo quevivir con esas circunstancias. De querer o también necesitar cierta intimidad o relaciones sexuales y tener que luchar también con que vives con alguien, porque tampoco tienes dinero para ir a algún motel. Entonces es complejo” . Román Avilés ha insistido en que no se siente culpable, ya que, según él, ninguno de los coimputados forzó o agredió a la joven. Sin embargo, informes médicos en la carpeta investigativa sugieren lo contrario, evidenciando lesiones compatibles con una violación. “Yo no me siento culpable. Tengo hermanas, y si en algún momento hubiese visto una agresión, hubiese reaccionado. Yo le pregunté si había consentimiento y dijo que sí. Es superincómoda la situación de estar acá siendo que no hice nada. No lo vi como una violación” , cerró. En atención a que no participó directamente de los hechos, esta jornada la Corte de Apelaciones de Antofagasta redujo su medida cautelar a firma quincenal, arraigo nacional y prohibición de acercarse a la víctima; mientras que confirmó la prisión preventiva para los otros ocho implicados.
Este viernes marca una semana desde que nueve excadetes de Cobreloa fueron privados de su libertad luego de ser formalizados por el Ministerio Público por el delito de violación en grupo. La acusación se basa en la denuncia de una joven que reportó haber sido víctima de una agresión sexual durante una fiesta en septiembre del año 2021. La causa estuvo archivada durante varios meses después de que la víctima inicialmente retirara la acusación, pero posteriormente se reactivó. Actualmente, la carpeta investigativa contiene una serie de peritajes, informes y declaraciones, tanto de la víctima como de testigos e imputados. Entre los documentos revelados por La Tercera se encuentra la declaración de Lucas Román Avilés, quien según el Ministerio Público prestó cobertura para que el delito se llevara a cabo. Aunque Román Avilés afirma no haber participado directamente en la agresión, admitió haber grabado y presenciado la escena. De acuerdo con su versión de los hechos, ese día Román Avilés llegó más tarde a la vivienda donde se celebraba la fiesta, la cual pertenecía a los ex cadetes y donde él residía. Al entrar en su habitación, se encontró con la joven identificada como inicial V manteniendo relaciones sexuales con Luciano Parra Villanueva y Jhan Góngora Ordóñez, según él, de manera consensuada. “Me quedo ahí y me dicen que grabe, lo hice, y alcancé a grabar tres segundos, pero después lo borro y me voy (...) Le pregunté a ella si estaba de acuerdo con lo que estaba pasando, y me dijo que sí” , detalló el excadete. Aunque la mayoría de los imputados han afirmado que la mujer aprobaba lo que ocurría, las declaraciones de Román Avilés han tendido a normalizar los hechos que desencadenaron la denuncia. Estaba acostumbrado a vivir situaciones de no privacidad, de sexualidad masiva. Muchas veces mis compañeros me decían que llegara más tarde, porque querían estar con una niña . Estaba acostumbrado, por eso esto no era chocante ya para mí, sostuvo. Además, el involucrado detallo quevivir con esas circunstancias. De querer o también necesitar cierta intimidad o relaciones sexuales y tener que luchar también con que vives con alguien, porque tampoco tienes dinero para ir a algún motel. Entonces es complejo” . Román Avilés ha insistido en que no se siente culpable, ya que, según él, ninguno de los coimputados forzó o agredió a la joven. Sin embargo, informes médicos en la carpeta investigativa sugieren lo contrario, evidenciando lesiones compatibles con una violación. “Yo no me siento culpable. Tengo hermanas, y si en algún momento hubiese visto una agresión, hubiese reaccionado. Yo le pregunté si había consentimiento y dijo que sí. Es superincómoda la situación de estar acá siendo que no hice nada. No lo vi como una violación” , cerró. En atención a que no participó directamente de los hechos, esta jornada la Corte de Apelaciones de Antofagasta redujo su medida cautelar a firma quincenal, arraigo nacional y prohibición de acercarse a la víctima; mientras que confirmó la prisión preventiva para los otros ocho implicados.